
Un libro medicinal para la evolución humana
Ita Wegman de Emanuel Zeylsmans van Emmichhoven
Presentación en el Centro Médico Yohanan 6-11-2012
Luis Weisntein
Este es un libro de indudable interés para quienes están en la medicina antroposófica, para las y los preocupados por la historia de la medicina antropósofica, para las y los antropósofos, en general.
Hablo de interés y, también, podría decir pasión, lectura coherente con las opciones de vida, responsabilidad. Es un libro para el mundo antroposófico.
¿Qué hace aquí, entonces, alguien que no participa de la vida antroposófica y los compromisos consiguientes? Es decir, alguien que es sólo , como le cabe al ser humano, a cualquier homo sapiens, un antropósofo silvestre.
Contestando este interrogante, resumiendo lo que deseo expresar, mi percepción es que este libro puede ser -además de objeto de lectura, de estudio, de diálogos y meditaciones, por parte de antropósofos, dentro y fuera de la medicina- una obra que tiene alcances, posee riquezas, que lo hacen un posible aporte, muy valioso, para toda la comunidad y, en particular, para los impulsos hacia el desarrollo del ser humano, de la conciencia, de la convivencia, del nuevo sentir común en que empiezan a converger la apertura hacia la trascendencia y la mirada integradora y compleja hacia el ser humano y la realidad; los ideales de siempre, la utopía del desarrollo humano y la preocupación por la emergencia de una macro crisis universal en la relación del ser humano con su vocación.
Vivimos una crisis de civilización en que un maravilloso desarrollo científico tecnológico que lleva a una comunicación instantánea a través de inmensas distancias en nuestra nave espacial, que permite la entrada a la intimidad del átomo y la llegada de un robot a Marte, logros multidimensionales cuyo eco entra, raudo, en nuestra cotidianidad, es acompañado de riesgos de guerras generalizadas capaces de acabar con la vida, de la presencia viva de guerras locales , de violencia, de soledad, de hambre, de pobrezas económicas, de pobrezas espirituales.
Crisis en que empieza a darse, difusa, con lentes muy diversos, la constatación de que el ser humano ha sido un aprendiz de brujo para sí mismo, un Prometeo que apaga el fuego del espíritu, un Dr. Frankestein que con la razón engendra monstruos…Una lenta conciencia de que el ser humano no se ve a sí mismo, no tiene Antroposofía en el sentido más amplio del término.
De allí que este libro, tan inspirado como documentado, tenga un lugar, pueda favorecer impulsos para llevar la Antroposofía al mundo, para conversar, para converger con otros en el ayudar a salir de la crisis, en educar para la vida, en desarrollar la salud en su sentido integral; sentido que incluye la espiritualidad.
La unidad empieza con el impulso, con la iniciativa.
Los indígenas fueguinos yámanas, los yaganes del sur, tenían una palabra, MAMIHLAPINATAPAL que describe una mirada entre dos personas “ cada una de las cuales espera que la otra comience una acción que ambas desean, pero que ninguna se anima a iniciar”.
Es hora de sobrepasar este pasmo. El lobo ya está aquí. Necesitamos acercarnos, decir las palabras , hacer las acciones en que converjamos. Ir hacia una coexistencia pacífica, creadora, respetuosa de la diversidad
Este libro entrega, en primer lugar, el regalo de una biografía de una persona destacada , realizada con rigor de historiador, muy bien documentada, con escrupulosa prescindencia de opciones emocionales sesgadas, como queda probado en la forma noble y delicada con que se trata a la figura de Marie Steiner.
Desde el ángulo de miras de quien aquí vemos como el otro, el no antropósofo, es lectura apropiada para lectores de biografías y de historia, para interesados en las grandes corrientes espirituales, para quienes buscan caminos de formación en practicas de salud integrativa.
Quienes están conscientes de la crisis evolutiva y están o buscan caminos para dar su contribución personal al respecto, en este libro encontrarán, adicionalmente, un ejemplo de cómo se puede dar en un ser humano la integración de la ciencia y la acción social, la ejecutividad y el desarrollo espiritual, grandes condiciones de Ita Wegman.
Hay algo más. Muy de fondo para cualquier persona con sensibilidad, aquí está el testimonio de una amistad y una relación maestro discípulo excepcional. Un entrañable vínculo humano, que hace recordar grandes amistades de grandes seres humanos, en toda su diversidad, desde los míticos Gilgamesh y Enquidú y Baucis y Filemón, las bíblicas Ruth y Noemí, hasta Albert Camus y René Char, Martín Heidegger y Hannah Arendt, Jung y Pauli, Horkheimer y Adorno, Marx y Engels, Helen Keller y Anne Sullivan, Goethe y Schiller.
La relación entre Rudolf Steiner e Ita Wegman, tiene planos en los que sólo pueden profundizar los antropósofos, pero posee, también, una dimensión que conmueve lo humano de los humanos. Es el delicado equilibrio entre el querer llegar al otro y el respetar su alteridad, el ser otro. Es el reino de la amistosofia, es una luz en el camino de integrar la dimensión original, única, de cada ser humano, con su realidad, con su identidad de pertenencia, de ser en el mundo, de ser con otros.
La lectura es ejemplo de un superar la inmovilidad cuando existe afinidad.
Es la amistad de maestro y discípulo que saben, en el momento oportuno, percibir lo importante, hablar, avanzar en la profundidad de la relación, acompañarse, integrarse en un proyecto para los otros, para lo otro, jugarse enteros por la solidaridad, saber relacionarse con la trascendencia.
La lectura de este libro, la amistad de Rudolf Steiner e Ita Wegman, puede contribuir a que se comparta la afirmación, tan actual, de Aristóteles, en cuanto a que la amistad es lo más necesario en la vida.